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La temperatura y la presión pueden afectar significativamente el rendimiento y la integridad de las bridas divididas en aplicaciones de alta temperatura o alta presión. Aquí está como:
1. Efectos de la temperatura:
Expansión térmica: en entornos de alta temperatura, los materiales comúnmente utilizados para bridas divididas, como acero al carbono o acero inoxidable, sufrirán expansión térmica. Este fenómeno natural hace que aumenten las dimensiones de los componentes de la brida.
La expansión térmica diferencial entre los componentes de la brida, la junta y la tubería puede provocar concentraciones de tensión en las articulaciones de la brida. Este estrés puede comprometer la integridad del sello y, con el tiempo, puede provocar una distorsión de la brida o la falla de la junta.
Los ingenieros deben tener en cuenta la expansión térmica al diseñar conexiones de brida dividida. Esto puede implicar elegir materiales con bajos coeficientes de expansión térmica o incorporar juntas de expansión en el sistema.
Selección de material: la selección de materiales se vuelve crítica en aplicaciones de alta temperatura. Las bridas divididas deben fabricarse a partir de aleaciones o materiales que exhiban una resistencia superior a la degradación térmica.
Las aleaciones de alta temperatura, como Inconel o Hastelloy, a menudo se eligen por su capacidad para mantener la resistencia mecánica y la integridad estructural a temperaturas elevadas.
Comportamiento de la junta: las juntas juegan un papel fundamental en el mantenimiento de un sello apretado de fluidos dentro de las bridas divididas. Sin embargo, a altas temperaturas, los materiales de la junta pueden sufrir varias transformaciones.
Algunos materiales de la junta pueden ablandarse, perdiendo sus capacidades iniciales de compresión y sellado, mientras que otros pueden endurecerse, aumentando el riesgo de fugas.
La selección adecuada de la junta para el rango de temperatura específico de la aplicación es esencial. Materiales como Graphite o PTFE (Teflón) son conocidos por su resistencia a temperaturas elevadas.
2. Efectos de presión:
Carga de pernos: las presiones elevadas requieren cargas de pernos más altas para crear y mantener un sello confiable. El tensión de los pernos debe ser preciso para garantizar que la junta se comprime lo suficiente como para evitar la fuga de líquidos o gas.
Los controles y ajustes de par regulares pueden ser necesarios para contrarrestar la relajación de la carga de pernos con el tiempo.
Diseño de brida: el diseño de brida debe tener en cuenta los niveles de presión anticipados en el sistema. Las bridas deben ser lo suficientemente robustas como para resistir la presión interna sin producir, distorsionar o fugas.
La selección de la brida y el acabado superficial se vuelven más críticos a alta presión, ya que cualquier imperfección o irregularidades puede servir como rutas de fuga.
Rutas de fuga: los diferenciales de alta presión pueden ejercer una fuerza significativa sobre la articulación de la brida. En presencia de imperfecciones, la presión puede forzar fluidos o gases para buscar posibles rutas de fuga, comprometiendo la integridad del sello.
La brida que enfrenta el mecanizado y la calidad de la junta deben cumplir con los estándares estrictos para minimizar el riesgo de fugas en condiciones de alta presión.
3. Efectos combinados:
Ciclismo térmico: aplicaciones que involucran calentamiento y enfriamiento cíclico, como procesos industriales, bridas divididas sujetas a tensiones de ciclo térmico.
La expansión repetida y la contracción de los componentes de la brida pueden provocar fatiga, lo que puede causar grietas o distorsión y reducir la vida útil de la articulación.
Relajación de fluencia y estrés: una exposición prolongada a alta temperatura y presión, los materiales pueden experimentar la deformación de la fluencia, lo que resulta en cambios dimensionales graduales.
Las juntas pueden sufrir relajación del estrés, reduciendo su compresión inicial y efectividad del sellado.
La selección de materiales, la inspección regular y el mantenimiento son estrategias clave para gestionar estos efectos a largo plazo.
1. Presión de trabajo de las abrazaderas de brida del código 61 de la serie SAE es de 3000 psi, 3,5 MPa (35 bar) a 35 MPa (350 bar).
2. Las dimensiones de abrazaderas de brida SAE están según ISO 6162-1: 2012. Tamaño nominal ISO: DN 13; DN 19; DN 25; DN 32; DN 38; DN 51; DN 64; DN 76; DN 89; DN 102; DN 127; Tamaño de pulgada: 1/2 "； 3/4" ； 1 "； 1 1/4" ； 1 1/2 "； 2" ； 2 1/2 "； 3".
3. Material de abrazadera de brida de una pieza SAE está hecho de acero al carbono C45, acero inoxidable 304,316 o 316L.
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